El término PSD2 puede parecer un acrónimo abstracto, de interés exclusivo para quienes se dedican a las finanzas. En realidad, la nueva Directiva de Servicios de Pago de la UE (de ahí PSD2) es la legislación que ha favorecido el nacimiento de Open Banking, una nueva forma de entender los servicios bancarios que ha aportado muchas ventajas tanto a los clientes finales (empresas y particulares) como a los operadores de este mercado. Oficialmente entrada en vigor a nivel europeo en enero de 2018 y operativa desde septiembre de 2019, la PSD2 ha supuesto un soplo de aire fresco en el mundo de los pagos y la gestión del dinero, haciendo que los bancos sean más abiertos, elevando los estándares de seguridad y haciendo que la oferta hacia los clientes sea más personalizada y accesible.
Por ello, aunque la Banca Abierta es ya una realidad consolidada en Europa que está avanzando hacia Open Finance, es de interés conocer más a fondo esta Directiva, explorar sus efectos en la vida de los ciudadanos y las empresas hasta el momento, y entender hacia dónde se dirige.
Como indican sus siglas, PSD2 es la 2ª Directiva de Servicios de Pago. En 2013, la Comisión Europea decidió reforzar los objetivos de la 1ª Directiva, una normativa que había entrado en vigor en 2009 con el objetivo de definir la base jurídica de un mercado único europeo de pagos y establecer servicios de pago más seguros e innovadores en toda la Unión.
Gracias a la nueva Directiva, la Comisión Europea obliga a todos los bancos a compartir los datos que obran en su poder con terceros proveedores regulados (normalmente empresas fintech). Esto se traduce en que los clientes finales (particulares y empresas) tienen más opciones y pueden decidir confiar la gestión de su dinero y los pagos realizados a entidades no bancarias autorizadas. A principios de 2023, había 559 TPP activas en Europa (refiriéndose al Espacio Económico Europeo y Reino Unido), y el mercado seguía aumentando su oferta de Account Information Services (AIS) y Payment Initiation Services (PIS).
Nota importante: los usuarios finales pueden autorizar a estos TPP a acceder a sus datos o revocar dicha autorización en cualquier momento y a través de su Banca electrónica.
Al entrar en vigor, la PSD2 ha introducido en el sector de los servicios de pago tres nuevas entidades descritas en un artículo dedicado, que se diferencian por su finalidad y su libertad de acción. Recopilamos enseguida sus características principales:
La introducción de la PSD2 persigue tres propósitos principales, que están fuertemente entrelazados:
Es únicamente gracias a la entrada en vigor de la PSD2 que hoy en día podemos hablar de Open Banking como lo hemos hecho en los últimos años. Esto se debe principalmente a que la PSD2 define las normas que permiten a las entidades bancarias abrirse a terceros proveedores, que se ven así en condiciones de crear productos y servicios innovadores, cada vez más orientados a responder a las necesidades de los clientes.
Además de aumentar la competencia, la introducción de la PSD2 y la expansión de la Banca Abierta permiten a los clientes finales disfrutar de mejores experiencias o acceder a nuevos servicios. Por ejemplo:
La licencia AISP también permite agilizar los procesos de incorporación de clientes (customer onboarding) y la experiencia general del usuario con productos y servicios específicos. De hecho, posibilita utilizar la información de la cuenta para verificar la identidad del titular y la propiedad de la cuenta de forma rápida y expeditiva.
Si, por un lado, la PSD2 ha generado grandes oportunidades para todas las partes interesadas, por otro, las instituciones de la UE pretenden colmar sus principales lagunas con una nueva Directiva (conocida como PSD3) que podría revolucionar aún más el mundo de los pagos, con el objetivo de cumplir plenamente lo prometido en lo que respecta a las API abiertas y la Banca Abierta y acercar a todo el sector financiero europeo a una visión de Finanzas Abiertas.
Considerando las cuestiones críticas que se pusieron de relieve en el último informe de la Comisión Europea sobre la aplicación y el impacto de la PSD2 publicado a principios de 2023, es muy probable que la PSD3 pueda dar lugar a nuevos cambios significativos en relación con:
El proceso para revisar la PSD2 ya ha comenzado con la promoción por parte de la Comisión Europea de una “Convocatoria de consulta” en mayo de 2022. A finales de 2023, está previsto que la Comisión Europea publique una propuesta legislativa inicial para superar la PSD2 que, a continuación, se espera que sea enmendada por el Parlamento Europeo y aprobada por el Consejo de la Unión Europea entre 2024 y 2025.